Spring Heel Jack - The Sweetness of the Water

Thirsty Ear. http://www.thirstyear.com/

Comentario: Probablemente decepcionado con el callejón sin salida al que el drum’n’bass lo había conducido, impulsado por el soplo del nuevo siglo, el dúo británico Spring Heel Jack (John Coxon/Ashley Wales), coincidiendo con su cambio al sello Thirsty Ear, se planteó emprender un cambio radical en sus composiciones estéticas y encaminarse, para sorpresa de mucha gente, hacia la improvisación electroacústica subsidiaria de la “british improv” y del free jazz, con una actualización simultánea de sus procedimientos y estrategias.

Tras la publicación de dos más que interesantes discos de estudio, Masses y Amassed, y un tercer Live que demuestra que nada de lo que se pudo escuchar antes eran simples trucos, sampleados engañosos o trabajo de maquinaria funcionando en régimen de autogestión, surge el anunciado cuarto capítulo de la segunda vida del dúo británico que, a semejanza de las ediciones anteriores, se hace acompañar de nombres que forman parte de la flor y nata de la libre improvisación actual.

Además de Coxon (guitarra, órgano, armónica, vibráfono, sampler y electrónica) y de Wales (guitarra acústica, trompeta, congas, sampler y electrónica), esta vez sus acompañantes son el brillante trompetista norteamericano Wadada Leo Smith, hombre de muchas vanguardias, Evan Parker, saxofonista reincidente (atención, aficionados a la improvisación: ¡Wadada y Parker juntos!) y otro novedad relativa a los episodios anteriores, la “sección rítmica” más solicitada de las islas británicas: John Edwards y Mark Sanders.

Musicalmente, The Sweetness of the Water es el más depurado y el menos denso y saturado de los cuatro discos. Quiero decir con esto que la música de Coxon y Wales, permaneciendo fiel a la improvisación electro-acústica y haciendo uso de idénticos procesos creativos, ha cambiado su rumbo en el sentido de que gana más espacio, orientada ahora hacia ambientes nocturnos, melancólicos y meditativos.

Las guitarras y la electrónica se funden con saxofones, trompeta, contrabajo y batería en una suite minimalista de progresión lenta, casi susurrante, alegoría de paisajes urbanos en horas tardías. Una ventana que se abre sobre una calle desierta después del regreso a casa; el reencuentro con la quietud de las cosas que nos rodean.

Admirablemente, The Sweetness of the Water, el más romántico de todos los discos de Spring Heel Jack, es un magnífico ejemplo de lo mejor que se hace actualmente en el campo de la improvisación electroacústica, capaz de romper con las convenciones del género. Simplemente fascinante.

Eduardo Chagas


<trio X 3> | New Jazz Meeting | Baden Baden 2002

Músicos:
Steve Lacy (saxo soprano), Peter Herbert (contrabajo), Wolfgang Reisinger (batería)
Marcus Weiss (saxos tenor y soprano), Philippe Racine (flauta), Paulo Alvares (piano)
Bernhard Lang (electrónica), Christof Kurzmann (electrónica), Philip Jeck (giradiscos)

Composiciones:
CD1 - directo
Differenz/Wierderholung 1.2.1 5:38
dw 1.2 remix karlsruhe 3.2 13:43 trio Jeck Herbert Reisinger
dw 1.2 remix tübingen 1.3 6:39 solo Kurzmann
dw 1.2 remix karlsruhe 3.11 8:11 Noneto
Differenz/Wiederholung 1.2.2 7:13
dw 1.2 remix freiburg 2.2 9:16 Trio Lang Kurzmann Reisinger
dw 1.2 remix freiburg 2.9 und 2.10 22:57 solo Jeck y Cuarteto Jeck Lacy Herbert Reisinger
Duración 1:13:40
CD2 - estudio
Differenz/Wiederholung 1.2.3 5:15
dw 1.2 remix 11.1 7:51 Trio Lang Kurzmann Reisinger
dw 1.2 remix 7.7 9:36 duo Jeck Lacy
dw 1.2 remix 8.3 6:43 cuarteto Jeck Herbert Alvares Weiss
Differenz/Wiederholung 1.2.4 6:53
dw 1.2 remix 7.4 6:22 trio Jeck Lang Lacy
dw 1.2 remix 9.1 17:17 cuarteto Jeck Kurzmann Herbert Weiss
dw 1.2 remix 11.4 5:00 trio Lang Kurzmann Reisinger
Duración 1:05:00

Differenz/Wierderholung 1.2.1, 1.2.2, 1.2.3, 1.2.4 compuestas y arregladas por Bernhard Lang

Fechas de Grabación:
Estudio: SWR Studio 1, Günter-Eich-Haus, 2 al 5 de diciembre de 2002
Directo:
Tübingen, Sudhaus, 6 de diciembre de 2002
Freiburg, E-Week, 7 de diciembre de 2002
Karlsruhe, Tolhaus, 8 de diciembre de 2002
Mezclas y remezclas: Bernhard Lang, Christof Kurzmann, Alfred Habelitz.
Editado en 2004.
hatOLOGY 2-607 http://www.hathut.com

Comentario: <trio X 3> es el encuentro entre distintas formas de expresión musical para trabajar sobre un repertorio común de base. En la génesis del proyecto está Southwest German Radio (SWR). En el año 2002, dentro del festival New Jazz Meeting en Baden-Baden (Alemania), se provocó el encuentro entre músicos provenientes de estilos aparentemente tan diversos como son la Música Electrónica, el Jazz y la llamada Nueva Música.

El compositor Bernhard Langer, Christof Kurzmann (Berlín) y Philip Jeck (Liverpool) recibieron unas grabaciones de Differenz/Wiederholung 1.2. Los dos primeros trabajaron con ellas, seleccionando unos samples para utilizar con sus ordenadores en directo. Philip Jeck seleccionó una serie de muestras sonoras que prensó en unos vinilos de cara a realizar su trabajo como dj.

Igualmente las partituras con las composiciones de Langer se hicieron llegar al pianista brasileño Paulo Alvares, al flautista Philippe Racine y al saxofonista suizo Marcus Weiss para que procedieran a su estudio.

Del mismo modo se hizo llegar el material al saxo soprano norteamericano recientemente fallecido Steve Lacy, al contrabajista residente en New York Peter Herbert y al batería vienés Wolfgang Reisinger para que se familiarizasen con él.

Como se puede apreciar, un fuerte trabajo previo precedió al encuentro de los nueve músicos. Este tuvo lugar durante una semana. Los cuatro primeros días los nueve músicos trabajaron en un estudio, dedicando los tres últimos a tocar en unos conciertos en Tübingen, Freiburg y Karlsruhe.

En estos encuentros en directo existieron tres restricciones, en vistas a provocar el encuentro y la interacción entre los músicos: en cada concierto el trio de Jazz debería tocar alternativamente con cada uno de los músicos provinientes de la electrónica, el noneto debería tocar conjuntamente y la composición DW 1.2 tenía que ser interpretada en las cuatro partes en que estaba planteada su versión original, para llamar la atención sobre las diferencias entre el original y las improvisaciones.

El resto es ya historia. Una historia escrita a lo largo de las más de dos horas y cuarto presentes en este doble compacto. Una música que establecida fuera de los límites preestablecidos, lo que hace es precisamente es ampliarlos. Algo así como una aproximación a la música total.

José Francisco "diyeipetea" Tapiz


Uri Caine Trio - Live at the Village Vanguard

Winter & Winter. http://www.winterandwinter.com/

Comentario: Uri Caine. El trío de piano. Un disco grabado en directo en el mítico club neoyorquino, el Village Vanguard, en mayo de 2003. No hay que pasar por alto este acontecimiento editorial que tiene su origen en esta feliz asociación de ideas.

Desde luego, porque Uri Caine, a pesar de la numerosas oportunidades que ha tenido para desarrollar su inmenso talento como pianista a través de los más diversos formatos y repertorios, en el jazz y fuera de él (abundan interpretaciones suyas de obras de Bach, Schumann, Beethoven, Wagner y Mahler), en disco rara vez se ha dedicado a abordar el trío de piano. Desde 1997, fecha en que grabó Blue Wail, con James Genus y Ralph Peterson, no conocía ninguna aventura suya por los ámbitos ahora revisitados en compañía de Drew Gress y Ben Perowsky.

Corte a corte, Live at the Village Vanguard, publicado por Winter & Winter, se revela como una grabación de creciente interés musical, pese a su larga duración (76 minutos), gracias al interesante repertorio que abarca viejos estándars (Cheek to Cheek de Irving Berlin y la curiosa elección de tres páginas del “song book” de Jimmy van Heusen), un clásico moderno (Nefertiti, de Wayne Shorter) y un tema inspirado en Verdi (Otello) de un total de seis originales del líder. Otro aspecto que contribuye a la frescura de la sesión es la alternancia entre tempos lentos, medios y rápidos, así como las sutiles variaciones de tonalidad, que van de los sombrío, casi melancólico, a lo luminoso.

A nivel estilístico, en el piano de Uri Caine son notorias las influencias de los maestros de las generaciones anteriores, en especial Bill Evans, McCoy Tyner y Herbie Hancock, pasando por Keith Jarrett. Sin embargo, no hay que creer que el pianista de Filadelfia se pasó las tres noches neoyorquinas mimetizando un estilo ajeno. De un modo eficaz, lo que hace el pianista, y muy bien, es integrar las diferentes huellas de los maestros en su propio discurso, reformulándolo todo en una corriente discursiva de destacada fluidez, libertad formal y sugestiva variación rítmica, cualidades realzadas por las notables contribuciones del contrabajista Drew Gress y del batería Ben Perowsky.

Más que meros acompañantes, Gress e Perowsky subrayan el ritmo que nace del teclado, le dan color y agilidad, puliendo todos los pormenores formales que brotan de las pistas lanzadas por el pianista. Juntos crean una música que, al mismo tiempo, sintetiza varias décadas del arte del trío de piano y compendia ante el público 10 años de actividad de Caine como improvisador. Pero dentro del jazz, como quedó demostrado durante las noches del 23 al 25 de mayo de 2003 en el Village Vanguard. Evidencia de que Uri Caine regresa al formato clásico, en el más clásico de los escenarios y en una gran forma creativa.

Eduardo Chagas


482 Music: Matt Bauder - Weary Already of the Way / Grey Ghost - How to Create Words

Matt Bauder - Weary Already of the Way

Músico: Matt Bauder (saxo tenor, clarinete), Aram Shelton (saxo alto, clarinete), Jeb Bishop (trombón), Todd Margasak (corneta), Rob Mazurek (corneta), Fred Lonberg-Holm (chelo), Jason Roebke (contrabajo)

Composiciones: 1 20:05, 2 7:58, 3 8:21, 4 16:08
Composiciones por Matt Bauder.
482 Music. 482-1025 http://www.482music.com/home/index.html

Grey Ghost - How to Create Words

Composiciones: Spitzacolli, Splendor, Horns and Organ, Hand Down, When You Say Go Leave, Command Control, Unheard Other Bands Practice, Spool, Keep On

Músicos: Johnathan Crawford (sintetizador, percusión, melódica), Aram Shelton (saxos, clarinete, trompeta, ordenador)

482 Music. 482-1022 http://www.482music.com/home/index.html

Comentario: Desde el sello de Chicago 482 Music llegan dos propuestas que coinciden en la forma de desarrollar el trabajo, en su propuesta musical y en el origen de sus intérpretes.

Musicalmente ambas trabajan en terrenos que bordean el Free Jazz y la libre improvisación. Ambas son obras también creadas a partir del trabajo en estudio. Y como sucede habitualmente en este sello, ambas muestran el trabajo de las jóvenes generaciones de Chicago, mostrando una escena que va bastante más allá de las propuestas de AACM (la mítica Asociación para el Avance de la Música Creativa).

Weary already of the way del saxofonista y clarinetista Matt Bauder es el resultado de la recreación de los sonidos surgidos en la mente del músico a partir del trabajo en estudio. Para tal tarea contó con la participación de algunos de los músicos más interesantes y activos de Chicago: Rob Mazurek, Fred Lonberg-Holm o Jeb Bishop entre ellos. Partiendo del trabajo individual de cada uno de los integrantes del septeto en el estudio (en una grabación en la que no hubo apenas ocasión alguna en la que todos los músicos tocaran juntos), más la labor en el estudio de Bauder (consistente en seleccionar, tratar y juntar los sonidos grabados por el grupo, más la adición de algún que otro sonido no procedente de la grabación base), resulta agradablemente sorprendente la escucha del resultado final. Un sonido a grupo, más allá de lo que se pudiera prever con todos estos antecedentes.

Grey Ghost es el dúo formado por Johnathan Crawford y el saxofonista presente en el anteriormente comentado Weary Already Of The Way. How to Create Words es el trabajo de estos dos músicos en estudio, incorporando todo tipo de técnicas en una obra que flirtea con el Free Jazz, la libre improvisación y la electrónica. Si en el anterior trabajo el uso de las técnicas de estudio eran más discretas, en este caso se hacen más evidentes, como sucede con el uso de grabaciones sonando de atrás hacia adelante, además de algo tan obvio como es la cantidad de instrumentos tan diversos que llegan a sonar en el trabajo de este dúo. De cualquier modo y quizás precisamente por esto, resulta una propuesta más que interesante.

En definitiva, la escena de Chicago sigue mostrando propuestas que van mucho más allá que AACM o figuras como Vandermark, con unos jóvenes músicos empeñados en seguir ampliando los caminos de investigación y ampliación del Jazz (hablando en un sentido muy amplio) del Siglo XXI.

José Francisco "diyeipetea" Tapiz


Peggy Lee Band - Worlds Apart

Spool. http://www.spoolmusic.com/

Comentario: El trabajo más reciente de la Peggy Lee Band, grabado en abril pasado y publicado hace poco por el sello canadiense Spool (Line 24, Improv Series) es un disco fantástico. Worlds Apart es su título. Escucharlo tres veces seguidas fue suficiente para quedar francamente impresionado con el trabajo de la señora de Vancouver y de sus muchachos.

En la música de Peggy Lee las melodías, de una belleza extraordinaria, son normalmente uno de los puntos fuertes. En materia de composición, Lee funde con gran acierto las vanguardias del jazz, el folk y la música contemporánea y le añade un toque de rock que confiere a los temas un irresistible punto picante. La improvisación nace allí mismo en el meollo del desarrollo de los temas, justamente en el dibujo de los recovecos en que se cruzan, se alejan y se vuelven a cruzar las líneas melódicas. Se desarrollan en varias direcciones simultáneamente, lo que recuerda al mejor Kenny Wheeler.

En cuanto a las melodías, además de las estructuras complejas muy bien urdidas, hay otras que se asemejan más a simples esbozos inacabados que la compositora/violonchelista parece haber querido dejar a propósito al libre albedrío creativo de los músicos para que hiciesen con ellas lo que les apeteciese.

Y el resultado es un trabajo exuberante, hecho con colores suaves y ritmos ligeros, con preponderancia en el trazo fino, casi plano en la superficie, sin accidentes geográficos de importancia. Pero de una profundidad tal que su dimensión apenas se puede sospechar en las primeras escuchas.

Nota máxima para el contrapunto del trombón (Jeremy Berkman) con la trompeta (Brad Turner), apoyados en la guitarra eléctrica y en el violonchelo, instrumento que en las manos de la señora Lee adquiere un sonido pleno e innovador, situando a la violonchelista canadiense al nivel de algunos de los mejores compositores e intérpretes de la actualidad, como Tristan Honsinger, Ernst Reijsiger y Eric Friedlander.

Merece destacarse a Dylan van der Schyff. Percusionista superior, tiene un pulsar y una noción del tiempo que impresionan. Lo mismo que cuando no toca. A veces basta un golpe ocasional en el bombo, dado en el tiempo justo que sólo él conoce, para crear todo un efecto dramático, un estremecimiento contagioso que entusiasma a los músicos y al oyente, permaneciendo todos, ellos allá y nosotros aquí, en total empatía.

Como se va a poder ver en el Jazz em Agosto de 2004, no es casualidad que, de unos años a esta parte, Canadá esté considerado como una gran potencia de la música improvisada moderna, una entre las más importantes líneas de avanzadilla por dónde rompe, vigorosa, la improvisación actual. Y en ese contexto prolongado es dónde se encuadra la música de Peggy Lee Band. Y este disco apunta caminos para un futuro lleno de nuevas y excitantes aventuras.

Eduardo Chagas


 

Dave Holland Quartet - Conference Of The Birds

Músicos: Dave Holland (contrabajo), Sam Rivers y Anthony Braxton (saxos, clarinetes, flautas), Barry Altschul (percusión, marimba)
Composiciones: Four Winds, Q & A, Conference Of The Birds, Interception, Now Here (Nowhere), See ­ Saw
Compuestas por Dave Holland

Grabado en noviembre de 1972. Editato en 1972. ECM 1027
http://www.ecmrecords.com/

Comentario: A veces es difícil escribir sobre lo qué sucede en la escucha un disco. Más cuando uno se encuenttra ante una de esas grabaciones tan especiales, al menos para quien esto escribe, como es esta conferencia de los pájaros. Pero no es difícil ni mucho menos.

Por tanto, vaya desde aquí mi doble agradecimiento al contrabajista David Holland. En primer lugar (especialmente) por permitirme disfrutar de su música tanto en sus grabaciones como en sus directos. En segundo lugar por expresar de una forma tan acertada una aproximación a la magia contenida en este disco. Decía este músico en las notas que acompañan al disco: "Cuando vivía en Londres tenía un apartamento con un pequeño jardín. En el verano, a las cuatro o cinco de la mañana, justo cuanto empezaba el día, los pájaros se iban juntando uno a uno y cantaban juntos, cada uno declarando su libertad con su canción. Mi deseo es compartir el mismo espíritu con otros músicos y comunicárselo a la gente." Si el propio autor lo expresa de esa manera, ¿para qué añadir nada más?

José Francisco Tapiz


John Heward Trio - Let Them Pass (laisser-passer)

Drimala Records. http://www.drimala.com

Comentario: La más reciente publicación del sello norteamericana Drimala Records, fundada y dirigida por Philip Egert y con sede en Hampton, Virginia, es también una de las mejores de todo su catálogo. Egert, ¿qué nos traes esta vez? Un disco soberbio, sin duda.

En Let Them Pass hay dos elementos que recorren toda la obra y que inmediatamente impresionan al oyente: la cohesión orgánica del trío, que da al conjunto la riqueza de las respectivas experiencias individuales, acentuando la intuición y la respuesta instintiva a los estímulos interactivos; y, a contracorriente de la primera, el excepcional acabado de las composiciones colectivas creadas espontáneamente en el momento en que fueron ejecutadas, sin cualquier retoque de postproducción.

La idea subyacente en la realización de este disco nos es dada por el propio productor. En las notas se lee que, en los días inmediatamente anteriores a la grabación, los músicos, todos ellos descendientes de inmigrantes, hablaron largamente sobre el coraje, la angustia y el sufrimiento en la época en que sus antepasados cruzaron el mar hacia el Nuevo Mundo, sabiendo que no había regreso posible, desconociendo todo lo que los esperaba al otro lado, llevando consigo nada más que un “Laissez-passer”, un documento que les garantizaría su desembarco. Aparte de eso, tenían como única perspectiva un encuentro con lo desconocido y lo inesperado, un mundo de preguntas sin respuesta, la vida en un hilo.

A partir de esta serie de reflexiones, sintonizados en una misma onda emocional e intelectual, John Heward, Joe Giardullo y Mike Bisio entraron en el estudio y ejecutaron siete variaciones sobre el tema Let Them Pass, una especie de banda sonora de lo que saben fue la gran aventura de la vida de quienes los precedieron.

Así pues, estamos en presencia de tres corrientes creativas paralelas que convergen en una multitud de puntos de intersección. John Heward, músico y artista plástico canadiense, el líder que no lo es, explora la batería como materia plástica, elemento primario a partir del cual compone las intrincadas sutilezas de sus esculturas sonoras, abriendo caminos para Joe Giardullo (saxo tenor, clarinete, flauta) y Mike Bisio (contrabajo), veteranos de la free music/free jazz. Ambos ilustres comunicadores de los estados del alma y de los sentimientos a través de la música, ofrecen en este disco unas prestaciones que están al nivel de lo mejor que se conoce de su trabajo, tanto en grupos como en proyectos individuales.

En todos los vastos dominios de la música improvisada, incluyendo el jazz a secas, es difícil encontrarse con talentos con una empatía musical tan elevada, gente capaz de lograr el milagro de provocarnos por enésima vez experiencias musicales que se presentan siempre como innovadores, emocional e intelectualmente estimulantes, capaces de desafiar nuestras concepciones sobre la vida y sobre la música.

Dicho esto, sólo resta sugerir a quien tenga un interés serio por el jazz en general y la música improvisada en particular, sea un conocedor experimentado o primerizo a la hora de descubrir estas formas, que escuche este disco y que le dé tiempo y espacio para echar raíces. Verá que no dará por mal empleada la vivencia de esta notoria celebración de la vida y de la memoria individual y colectiva.

Eduardo Chagas


Jordi Bonell – Agua Madre

Composiciones: Te llenaré de luz (Jordi Bonell & Juan Gómez “Chicuelo”); Rumba, rhythm & blues (Jordi Bonell); Sobran las palabras (Jordi Bonell); Preludio en re (Johann Sebastian Bach); Strangers in Paradise (Borodin, Wright & Gorest); ¡Niño...estate quieto! (Jordi Bonell); Cati (Jordi Bonell); A mí me andan siguiendo (Jordi Bonell & Juan Gómez “Chicuelo”); El guapo (Jordi Bonell); Caminando sobre el agua (Jordi Bonell); J.S.B. (Jordi Bonell)

Músicos: Jordi Bonell (guitarras, citern-midi, mandolina, palmas), Carmen Canela (voz), Miguel Poveda, Duquende (cante), Antonio Serrano (armónica), Antonio Marínez “Ñoño”, Juan Gómez “Chicuelo” (guitarras flamencas), Luis Salinas (guitarra eléctrica), Chano Domínguez (piano), Antoni Olaf Sabater (piano y teclado), Rai Ferrer (contrabajo), Carles Benavent (bajos eléctrico y midi, mandola, palmas), Ferrán Cubedo (baby bass, ultracontrabajo), Roger Blavia, Rafaelito Salazar, Andreu Simón (batería, percusión y palmas)

Grabado en Estudios B&B y Zanfonia (Barcelona), y en el estudio casero de Carles Benavent (Barcelona), 2002 y 2003.
World Village 498005

Comentario: De todos es conocida la enorme calidad, experiencia y adaptabilidad de Jordi Bonell. En este Agua Madre de reciente aparición, pero que el guitarrista grabó entre 2002 y 2003, da buena cuenta de todo ello, hasta tal punto que llega a parecer fácil.

Sin embargo Agua Madre es un disco de detalles. Detalles de mucha clase tanto en las guitarras solistas como en las rítmicas, detalles en la instrumentación (ningún instrumento de viento, a excepción del buen solo de Antonio Serrano en A mí me andan siguiendo), detalles que hacen de este un CD no especialmente espectacular ni definitivo, pero muy interesante de escuchar. Bonell se mueve entre la rumba, el bolero y el rock, adaptando los temas a su gusto con soltura, y espacio suficiente para improvisaciones. La presunta linealidad provocada por la instrumentación ya comentada queda totalmente de lado gracias a las enormes colaboraciones de Chano Domínguez y, sobre todo, de Carles Benavent, cuya aportación es clave para el éxito del disco. Especialmente reseñable es el sexto corte, ¡Niño...estate quieto! donde guitarrista y bajista se enzarzan en un divertido duelo a bordo de sendos instrumentos MIDI. En Cati Bonell demuestra su claridad de sonido a guitarra sola, y en el Preludio en Re de Johann Sebastian Bach su libertad a la hora de arreglar.

La producción del CD, con libreto de Santiago Auserón, también corre a cargo del propio Bonell. La bonita edición incluye una etiqueta de “Jazz fusión” que quizás se quede algo corta (o más bien imprecisa) para definir el amplio rango estilístico que cubre el disco. Como todas las etiquetas, por otro lado.

Arturo Mora Rioja, 2004


Rodrigues-Uebele-Rodrigue-Oliveira - contre-plongée

Músicos: Ernesto Rodrigues (violín, viola), Gerhard Uebele (violín), Guilherme Rodrigues (cello), Jose Oliveira (guitarra, inside piano)
Grabado en Lisboa 2003
Creative Sources

Comentario: El cuarteto de cuerdas representa una de las cumbres de la expresión musical en la tradición musical europea (la “música clasica”). Ese mismo formato, en la libreimprovisación electroacustica, poco tiene que ver.

La nueva entrega del clan Rodrigues pone de nuevo de manifiesto que la onda portuguesa va más acelerada que la minimalista berlinesa que es la que ha marcado estilo e indicado la dirección. Para entendernos, lo de los lusos sería algo asi como el minimal barroco.

Carente de discurso lineal, los temas-improvisaciones toman cuerpo de la yuxtaposición-interacción-superposición-encadenado… de los frotamientos-roces (accidentales o deliverados)-deslizamientos… que sufren las cuerdas y los soportes de estas (ya que se trata de un cuarteto de cuerdas).

De lo anecdótico al caos pasando por momentos dignos de documental. Otra experiencia de los Rodrigues.

jesusmoreno


Jeff Gburek - Energariums

Nurnichtnur/Metal Box Series 2004
http://www.nurnichtnur.de

Comentario: Coja una guitarra en los brazos. Electroacústica si puede ser. Colóquela sobre una superficie plana, una mesa por ejemplo. Siéntese a la mesa. Disponga un surtido de objetos sobre la guitarra: clavos, cubiertos, espátulas y otros elementos metálicos. Mézclelo todo bien con las cuerdas de acero. A continuación, añada cascabeles, motores eléctricos en miniatura y todo lo que se le ocurra que pueda ser restregado y percutido sobre el cuerpo de la guitarra. Conecte la salida de la guitarra a una mesa de mezclas donde previamente preparó una buena cantidad de efectos sonoros sugeridos, no por el sonido producido en la fuente, sino por la imaginación, anticipando lo que de saldrá de allí. Por último, disponga el cableado de tal forma que produzca feed-back y dosis generosas de ruidos de fondo. Mézclese con las altas frecuencias producidas después de conectarlo todo a la corriente eléctrica.

La receta no es original. Todo guitarrista experimental que se precie ya la ha probado o tiene ganas de hacerlo. Al final, lo que distingue el trabajo de unos y otros, más que la naturaleza de los materiales utilizados, es el resultado sonoro producido. Evitar los lugares comunes que abundan en este tipo de proyectos de “plug and play” no es tarea fácil. Pero hay quien consigue eludir las tentaciones más obvias y desvía su camino buscando nuevas combinaciones y recombinaciones sonoras electroacústicas.

Ese es el caso de Jeff Gburek, guitarrista autodidacta experimental norteamericano (Alburquerque, Nuevo México), nacido en 1963. Artista precoz, hace casi tres décadas que se dedica a la investigación sonora en los ámbitos citados, realizando incursiones ocasionales en los territorios del rock (colaborando por ejemplo con Tom Carter y Charalambides). Optando por devaluar la técnica de ejecución con la guitarra (“simples recuerdos de viejos sistemas”), Gburek apuesta por revitalizar, remover y reconstruir materiales, las tres “R” que profesa y aplica en la creación del sonido. Para su fabricación, convoca un amplio espectro sonoro, basado en conceptos heterodoxos de la pintura, el collage y la escultura, con interesantes resultados a nivel de organización musical. Una de las palabras clave en este proyecto de Jeff Gburek titulado Energariums es precisamente la “organización”, idea que explica, al mismo tiempo, la cualidad de los resultados obtenidos y la diferenciación respecto a otros productos de concepción similar basados en la tríada sujeto–guitarra-objetos.

Pero no sólo de trabajo en solitario ha vivido la carrera de Jeff Gburek. Nómada, hace años que lidera el proyecto Djalma Primordial Science con la bailarina Ephia; forma parte del trío electroacústico alemán ZYGOMA (con Michael Vorfeld y Michael Walz) y trabaja con el multiinstrumentista de Chicago Kyle Bruckmann, con el trombonista alemán Conrad Bauer y el guitarrista británico Keith Rowe (AMM). Con ellos, comparte gustos, estrategias, influencias estéticas y, sobre todo, el mismo interés en la vertiente europea de la música improvisada y experimental moderna con base tecnológica.

Satisfactorio y sorprendente (los seguidores del género tienen mucho que aprovechar de ello) es este reciente lanzamiento del sello alemán Nurnichnur (http://www.nurnichtnur.de), en la serie “Experimental Sound Productions”, que merece una escucha atenta y repetida que facilite la asimilación de los más ínfimos pormenores acústicos de este aventurado viaje a través de la niebla cerrada que envuelve al oyente y lo transporta a las profundidades de su ser.

Eduardo Chagas


Alfredo Costa Monteiro - Rumeur (for solo accordion)

Músico: Alfredo Costa Monteiro acordeón
Grabado en Marzo del 2003 en Barcelona
Creative Sources

Comentario: Costa Monteiro, guitarrista, electrónico o acordeonista, improvisador de origen portugues afincado en Barcelona (donde forma parte del triunvirato IBAImprovisadores de Barcelona Asociados- junto a Ferran Fages –guitarra, electrónica y responsable del sonido de esta grabación- y Ruth Barberan –trompeta-). Además de en diversas combinaciones con estos y otros improvisadores ya se nos había presentado (discograficamente) a solo, improvisando/creando con gomas elásticas o papel. Ahora le toca el turno “con su instrumento”.

Tocar, lo que se dice tocar, no es que toque mucho el acordeón, o por lo menos según el modelo de la famosísima Maria Jesus (la del) ya que lo suyo es la manipulación (¿no ha pensado dedicarse a ala política con semejantes maneras?). De lo que no hay duda es de que lo que ofrece es lo que anuncia en el titulo, ya que lo que podemos escuchar son cinco “rumores” (que no cotilleos). De lo que no cabe la menor duda es que más de uno no tendrá muy claro el explicativo entre paréntesis del “for solo accordion”. Pero eso, tal cual, es lo que hay. Un (cinco de hecho) “Rumor” creado con-sobre-desde… un acordeón (uno solo).

jesusmoreno


Matt Shulman - While we Sleep

Músicos: Matt shulman (trompeta), Aeri Hoening (batería), Matt Penman (contrabajo)

www.shulmansystem.com

Comentario: Aunque la originalidad sea difícil de encontrar en las propuestas musicales más abundantes y, por desgracia, más conocidas, siempre es de agradecer un disco en el cual se asuman riesgos.

While we Sleep es el primer disco del trompetista americano Matt Shulman, músico de gran nivel que ha colaborado con Ethan Iverson, John Medeski, Brad Mehldau o Seamus Blake, pero que, sin embargo, aun no se ha dado a conocer al gran (o no tan gran) público europeo. Por supuesto esto viene provocado, en gran parte, por no disponer de grabación con ninguno de los grandes sellos discográficos actuales. Supongo que tanto músicos como aficionados tendremos que acostumbrarnos a prescindir de los grandes sellos en el futuro, teniendo en cuenta como están las cosas a ese nivel.

Se presenta aquí un disco atípico, en formato de trío, junto al baterista Aeri Hoenig y el bajista Matt Penman (muy activo en la escena de músicos jóvenes de Nueva York), en el cual Matt a partir de, en su mayoría, composiciones originales y, con el añadido de dos standards tan conocidos como Mack the Knife o Bye Bye Blackbird, explora nuevas posibilidades musicales dentro de este siempre difícil formato.

En los últimos años hemos tenido posibilidad de escuchar tríos de trompetistas tales como Dave Douglas, Paolo Fresu o Tim Hagans, sin embargo la música aquí presente resulta tremendamente original, desmarcándose claramente de otro tipo de propuestas. Sin duda estamos ante un músico de gran personalidad, lo cual provoca una música sin concesiones.

El disco comienza con el tema Midnight bugle call, composición propia que resulta toda una declaración de intenciones con respecto a lo que al oyente le espera. A pesar de ser un disco variado en cuanto a tempos y ritmos, existe una característica constante a lo largo de todo él; estamos ante una música eminentemente reflexiva. El formato de grupo elegido obliga al solista a asumir el papel protagonista de forma más evidente de la que sería necesario en otro tipo de formación. Sin embargo, gracias a su técnica fuera de lo común, pero siempre al servicio de la música (algo que no siempre ocurre y siempre es de agradecer), supera la prueba con brillantez.

También hay que hacer notar el dominio que Matt tiene de la técnica llamada multiphonics, la cual le permite hacer sonar varias notas a la vez a través del instrumento, en su caso perfectamente afinadas, lo que le posibilita acompañarse a sí mismo y crear modos alternativos de rellenar los grandes espacios que este tipo de grupo provoca.

Quizá el único “pero” que se le pueda poner sea la monotonía que, para algunos, puede provocar la escucha completa ininterrumpida de un disco de este tipo, que, además, tiene una duración de 75 minutos. Sin embargo tras varias escuchas será muy difícil no valorar en gran medida la calidad de éste.

Músico a tener en cuenta en los próximos años, podemos descargar y oír de forma gratuita un par de temas de su disco en su página web, www.shulmansystem.com así como ver online una actuación de su trio en el Kennedy Center of permormings arts.

Javier Manzanares Hernández


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