>> VOLVER A TOMAJAZZ

 
 

 

   

WORLD SAXOPHONE QUARTET EXPERIENCE "TRIBUTO A JIMI HENDRIX"
Contrastes en Jazz

  • Fecha: 19 de mayo de 2006.
  • Lugar: Colegio Mayor Universitario San Juan Evangelista.
  • Componentes:
    David Murray - saxo tenor.
    Jorge Sylvester - saxos alto y soprano.
    Oliver Lake - saxo alto.
    Hamiet Bluiett - saxo barítono.
    Jamaaladeen Tacuma - bajo eléctrico.
    Lee Pearson - batería.
  • Comentario: Los cócteles son peligrosos.  Pueden provocar empachos o indigestiones si el barman no es muy experto, o bien requerir un trabajo ímprobo para ofrecer un resultado discreto.  No fue el caso la noche del viernes.  El World Saxophone Quartet ofreció una actuación explosiva, llena de fuerza e intención, aprovechando los recursos que ofrece la agrupación de vientos, la aportación de bajo y batería en clave funky y el concepto hendrixiano que servía de excusa para esta nueva reunión de la veterana banda.

    Con la presencia del panameño Jorge Sylvester continuando la lista de sustitutos de Julius Hemphill al alto y soprano (lista engrosada por, entre otros, Arthur Blythe, Eric Person, James Spaulding y John Purcell), el cuarteto abrió el concierto sin acompañamiento, fundiendo los trinos de los cuatro metales en una chillona textura que permitió el paso de la parte escrita a la libre improvisación colectiva con tal naturalidad que el cambio se hizo difícil de apreciar.  Después apareció sobre el escenario una sección rítmica que destilaba funk por los cuatro costados: el espectacular batería Lee Pearson con sus dos cajas y Jamaaladeen Tacuma, con su Fender Precision rojo lleno de pegatinas y colgado a la altura de su cintura.  Ambos estuvieron toda la noche entregados al groove, sirviendo de sólido colchón al discurrir de sus compañeros y divirtiéndose como nadie.  La presencia de estos dos músicos restó importancia a los arreglos, pero aportó variedad y concisión, ampliando el discurso del cuarteto y aportando sabores distintos al mencionado cóctel.  Las improvisaciones de los saxofones comenzaban a trío para luego dejarse seducir por el encanto de los otros tres metales en su arreglo escrito, y en la irreconocible versión de "Hey Joe" los acompañamientos, sencillamente feroces, facilitaron sobremanera el discurso de los veteranos solistas.   Fue en este tema donde Hamiet Bluiett nos dejó una brillante interpretación a dúo con un Pearson que reaccionaba de forma tan inmediata a los estímulos de su barbudo compañero, que a veces daban la sensación de estar tocando pequeños fragmentos al unísono.  "If Six Was Nine" comenzó con swing para, posteriormente, devenir en una borrachera pseudo-free, con Sylvester al soprano y especial protagonismo para Tacuma y Pearson.  Este último arrancó el aplauso más sonoro del respetable, tras una larga intervención solista en la que hizo gala de todo tipo de artificios, aporreando todos los elementos de su batería a velocidades supersónicas, tocando a una mano con la otra baqueta haciendo equilibrio sobre su cabeza, cruzando ambos brazos tras su espalda, prescindiendo de ambas baquetas e incluso levantándose de su sitio y utilizando cualquier objeto sobre el escenario (hasta las propias tablas del escenario llegó a utilizar) como elemento percusivo.

    El gran David Murray calmó la situación gracias a un precioso solo a tiempo lento con un sonido espectacular, riquísimo en armónicos y potente como pocos, para dar paso a una incendiaria adaptación de "Machine Gun" donde nuevamente Pearson y Tacuma dieron una lección de funk al servicio de la improvisación, abiertos y flexibles pero, a la vez, precisos y decididos.   Los originales de Hendrix sufrieron tal metamorfosis al pasar por el tamiz del grupo que llegaba a ser complejo reconocerlos y, tras otra buena improvisación de Bluiett, el espectáculo llegó a su fin.  O casi.  El bis de rigor, más convencional, nos permitió descubrir las cualidades vocales de Murray a ritmo de blues.  Y es que, parafraseando a Karlos Arguiñano, qué fácil es degustar un cóctel cuando éste sale "rico, rico y con fundamento".

    Otro hecho reseñable es la reinauguración de la página web del Colegio Mayor San Juan Evangelista, el popular Johnny que sigue acercándonos a la buena música y, por supuesto, al buen jazz en directo tras décadas de actividad. No se lo pierdan: http://www.sanjuanevangelista.org/

    © 2006