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Pamplona, y por extensión Navarra, es bastante más que los Sanfermines, y las imágenes y noticias que escandalizan o asombran en diarios, revistas y noticiarios. Desde hace unos años la capital de Navarra es una de las pocas ciudades en nuestro país en las que se imparte el Grado Superior de Jazz. La necesidad de establecer un departamento para su enseñanza, y la presencia a su vez en el Conservatorio Profesional de enseñanzas relacionadas de un modo directo o indirecto con el jazz, ha provocado que la escena de Pamplona esté en estos momentos en un punto de máximo apogeo.
Algunos jazzmen veteranos (o no tanto)… o cómo lo actual no surge de la nada.
El interés por el jazz en Navarra viene de lejos. Sin pretender convertir este artículo en una lista interminable de nombres, comenzaré con una omisión. No citaré a Pedro Iturralde (nacido en Navarra) por no haber tenido una gran participación en la escena navarra en los últimos años, salvo por sus visitas para dar algunos conciertos. No sería justo no mencionar al saxofonista Javier Garayalde y al trompetista Ramón García: ambos han grabado varios discos de jazz en los 80 y 90 del pasado siglo, y sin su figura la escena de Pamplona y por extensión la de Navarra no habría sido lo que es en estos momentos.



Avanzando en el tiempo, hay que mencionar al saxofonista Iñaki Askunze, que además de grabar alguna obra a su nombre que enamoró al mismísimo Arturo Pérez Reverte (La calle de la duda se titulaba el notable artefacto sonoro), ha estado al frente de varias big band, como la Iruña Big Band y la Pirineos Jazz Orchestra, primera orquesta de jazz que consiguió algo tan meritorio como una financiación internacional-interautonómica, gracias a que enrolaba a músicos de Francia y España (Navarra y Euskadi), cuyas administraciones apoyaron dicho proyecto. Otro músico a mencionar es el saxofonista Mikel Andueza, que incluso llegó a grabar el CD De Javier a San Javier como un encargo de este festival murciano, algo de lo que muy pocos músicos pueden presumir. Aunque hace mucho que se espera una nueva grabación a su nombre, hay que celebrar su participación en el más que recomendable Norma Jean Baker (Errabal Jazz, 2014) como integrante del Gonzalo Tejada Quartet.






La nueva hornada de músicos de jazz en Navarra: algunos nombres y algunas pistas
Precisamente la Broken Bothers Brass Band es una propuesta que mira hacia la tradición de las brass bands de Nueva Orleans, pero que no tiene reparos en invitar a sus conciertos y grabaciones a distintos raperos como el saxofonista Hugo Astudillo (encarnado en Escandaloso Xpósito) o a Moisés No Duerme (de Raperos de Emaús). Su última grabación titulada In The Mud (Errabal Jazz, 2015), contiene además de visitas (una vez más) al legado del gran Charles Mingus, un buen número de temas propios, entre los que se incluye el irresistible hit titulado “Gusano”. Paralelo a este proyecto está el colectivo Iruñea Nola, con una fuerte implicación política. Tras los pasos de la Broken está la J & P Brass Band, todavía sin grabación que presentar.






Muy interesante en todos estos proyectos es la tupida red que tejen estos jóvenes músicos, que de una propuesta a otra ceden el liderazgo de los grupos y pasan a un segundo plano: Arza participa en el proyecto de Arteta, mientras que a su vez Arteta participó en el proyecto de Arza. Mikel Andueza es a su vez un invitado de lujo en la grabación de este último. Por su parte el trompetista Ion Celestino (líder de la Broken Brothers Brass Band) participa en la grabación de Arteta, mientras que este es a su vez miembro de la Broken. Juanma Urriza está en la batería en estas dos grabaciones y también es miembro de cuarteto que grabó el ya citado Pagoda. Este asunto tiene mucha importancia porque un conjunto no muy numeroso de músicos se mueve por distintos proyectos con orientaciones estilísticas muy diversas, lo que sirve para dar una muestra de su apertura de miras musical.






No sólo de saxofonistas vive el panorama navarro, y la impartición de clases en el Superior de jazz, ha provocado que músicos como el trombonista Marco Bellizzi estén desarrollando su labor en Pamplona. Su proyecto Boîte à Musique, en el que le acompañan el guitarrista Luis Giménez y el contrabajista Fran Gazol (ambos compañeros suyos en el Superior de jazz), junto con el baterista Gonzalo del Val y el pianista Iñaki Sandoval (otro músico navarro aunque residente en Barcelona). Esta aventura musical está en plena fase de micromecenazgo, aunque ya ha sido presentada en directo en Pamplona. Los aficionados esperamos la publicación de la grabación.
La diáspora navarra: adiós Navarra…
Epílogo
Para finalizar: excusatio non petita…
Acusatio manifiesta. Así reza el adagio latino. Este artículo ha pretendido dar una serie de pistas que sirvan para que el lector interesado se anime a escuchar a algunos de los grupos y músicos que se mueven por la escena jazzística pamplonesa. Todas y cada una de las grabaciones mencionadas no habrían sido posible sin la participación de un buen número de músicos más allá del titular de la grabación: excusas por tanto, por no mencionarlos a todos. Excusas también por los olvidos o por la no mención de otros proyectos y grupos que sin duda debieran haber aparecido en este dossier.
La esperanza que alberga quien escribe estas líneas es que esta escena siga floreciendo, que sigan apareciendo nuevos músicos, y que siga habiendo un buen ambiente que permita que los músicos vayan participando en distintos proyectos, para que en no mucho tiempo se tenga que publicar una nueva entrega de un dossier dedicado a la escena jazzística en Navarra.
Addenda (septiembre de 2015)
Texto: © Pachi Tapiz, 2015
Fotografías: © Sera Martín, 2015
El texto original se publicó en el número 39 (verano de 2015) de la revista Más Jazz. Este está reproducido con el permiso de la revista y su director, Ernesto Schmied. La Addenda se escribió la tarde del 9 de septiembre de 2015.
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