- Fecha: Sábado 10 de mayo de 2014
- Lugar: Civivox Iturrama, Pamplona, Navarra
- Grupo:
Carmen Souza: voz, guitarra, piano, teclados y percusión
Ben Burrell: piano y voz
Theo Pascal: bajo, contrabajo y voz
Elias Kacomanolis: batería, percusión y voz
La cantante Carmen Souza y su cuarteto triunfaron con su mezcla de jazz y música étnica, vital y colorista, ante un repleto auditorio del Civivox de Iturrama. Su visita a Pamplona coincide con el lanzamiento de su última grabación, Live At Jazz Ligni (Galileo MC), grabado en directo en el festival francés. A lo largo de algo más de una hora y cuarenta y cinco minutos la artista portuguesa encandiló al público con su voz (que abarca un gran rango) y sus magníficos acompañantes, entre los que destacó especialmente el pianista Ben Burrell.
En su propuesta hay ecos de música de Cabo Verde (como en el magnífico tema “Afri ka” con el que puso a todo el público a cantar en dos ocasiones, ya que no se resistió a ofrecerlo como bis), de Brasil y de Cuba, pero especialmente hay jazz. A lo largo del concierto sonaron unas cuantas versiones: “My Favourite Things” (el vals de la película Sonrisa y lágrimas que John Coltrane convirtió en un standard jazzístico), “Song For My Father” de Horace Silver. Otro cásico fue “Donna Lee” (tema original de Charlie Parker, que en su versión en directo debió mucho a Jaco Pastorious), que Carmen Souza reveló como una de las mejores concieras de kachupada, el guiso típico de Cabo Verde. También sirvió, cómo no, para que Theo Pascal se luciese con un gran solo de bajo.
La vocalista no solo cantó, sino que acompañó a su trío como instrumentista utilizando una variedad de pequeñas percusiones, la guitarra e incluso en algunos temas el piano y teclados. Empleó el scat, y se movió con un gran control e igual facilidad por los registros graves que por los agudos, ajustándolos a las necesidades de los temas, fuesen estos en tempo rápido, medio o lento. El trío de acompañantes rayó a gran nivel. Carmen Souza es la líder del grupo, pero ello no impidió que sus tres acompañantes tuviesen espacio para demostrar su nivel. El pianista Dave Burrell se movió por unos solos que no sólo fueron muy vistosos, sino que fue capaz de entrar en unos pasajes complicados de los que salió con gran resolución. Theo Pascal alternó el bajo y el contrabajo. Su momento más brillante del concierto fue en el “Donna Lee” que miró hacia Pastorius. Finalmente el baterista y percusionista mozambiqueño Elias Kacomanolis tuvo que esperar hasta el último tema del concierto para disfrutar de un solo que dado el nivel del concierto, entusiasmó al público.
Texto: © Pachi Tapiz, 2014
Fotografías: © Sera Martín, 2014
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